El negocio de los seguros médicos en México enfrenta una crisis silenciosa. Las aseguradoras en México no solo han sido señaladas por maltrato hacia sus asegurados, sino también por tomar represalias contra sus propios agentes cuando estos apoyan a los clientes en reclamaciones. La práctica ha crecido en los últimos años y revela un sistema donde los intereses corporativos se imponen sobre los derechos de los usuarios y de quienes los representan.
Represalias Contra Quienes Buscan Justicia
En Nuevo León, agentes y empresarios del sector aseguran que las aseguradoras en México castigan a quienes intentan defender a los asegurados. Las sanciones incluyen desde la reducción de comisiones hasta la cancelación de claves de intermediación, lo que impide a los agentes seguir operando.
Un especialista con más de tres décadas en el ramo explicó que esta práctica comenzó a observarse hace unos ocho años, pero se ha intensificado recientemente. El motivo: los juicios orales han permitido resoluciones más rápidas a favor de los clientes, lo que ha provocado que las compañías busquen nuevas formas de evitar pagar indemnizaciones.
“Cuando los jueces empezaron a dictar sentencias más justas, las aseguradoras respondieron amparándose o retrasando los procesos para prolongar los casos. Así evitan desembolsar”, dijo el empresario bajo condición de anonimato.
Los agentes, por su parte, han sido los más afectados. Aquellos que acompañan a sus clientes durante las reclamaciones enfrentan represalias directas, como la cancelación de sus permisos de intermediación. Esta situación los deja sin ingresos y sin la posibilidad de continuar vendiendo pólizas.

Comisiones Reducidas Y Falta De Regulación
Además de las sanciones laborales, las aseguradoras en México han disminuido los porcentajes de comisión que pagan a sus agentes. Compañías grandes como AXA, GNP o Seguros Monterrey han reducido el margen de utilidad de los intermediarios del 18 al 6 por ciento.
“Nos castigan bajando comisiones por ayudar al cliente. Antes ganábamos hasta un 18 por ciento, ahora apenas un 7”, explicó uno de los afectados. Según los testimonios, las aseguradoras con más presencia en el mercado son también las que aplican los recortes más severos, mientras que las firmas nuevas buscan atraer promotores con mejores condiciones.
La falta de regulación efectiva agrava el panorama. La Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef) no tiene facultades legales para obligar a las aseguradoras a cumplir sus recomendaciones. En la práctica, los fallos del organismo se quedan sin consecuencias.
“Ir a Condusef es perder el tiempo. Te pueden dar la razón, pero la aseguradora puede ignorar el dictamen sin enfrentar sanciones”, explicó un agente.
Asegurados En Desventaja Y Envejecimiento Castigado
Los clientes también se encuentran en una posición cada vez más vulnerable. Las aseguradoras en México aplican incrementos anuales en primas, deducibles y copagos, además de restringir cambios de plan o renovaciones a quienes envejecen o desarrollan enfermedades crónicas.
“Si ya tienes una enfermedad o cierta edad, ninguna aseguradora te acepta. Ni siquiera dentro de la misma compañía te permiten cambiar de plan. Los nuevos productos solo son para clientes nuevos”, señaló un agente consultado.
Esta política ha creado un círculo de exclusión que afecta especialmente a adultos mayores y pacientes con padecimientos previos. En la práctica, quedan atrapados en contratos cada vez más caros y con menos beneficios.
La situación contrasta con otros países donde los sistemas regulatorios protegen mejor a los usuarios. En México, la combinación de intereses económicos, vacíos legales y falta de sanciones genera un entorno de abuso normalizado.
Lo Que Pueden Hacer Las Aseguradoras En México, En Estados Unidos Se Castiga
El contraste con el sistema estadounidense es evidente. En Estados Unidos, la ley exige que hospitales y aseguradoras transparenten precios, diagnósticos y cobros, bajo supervisión federal. La llamada “Regla de Transparencia de Precios Hospitalarios”, impulsada por el Departamento de Salud (HHS) y confirmada por tribunales federales, obliga desde 2021 a todos los hospitales a publicar sus tarifas y acuerdos con aseguradoras.
Cada institución debe revelar los costos de cirugías, tratamientos y servicios de emergencia, lo que permite a los pacientes comparar precios y denunciar irregularidades. Si un hospital incumple, puede ser sancionado o perder su licencia.
En cambio, en México no existe un control real. Los hospitales privados pueden modificar sus tarifas sin aviso y las aseguradoras no están obligadas a justificar sus decisiones de cobertura o los montos cobrados. Este vacío normativo beneficia a las empresas y perjudica a los usuarios, que enfrentan cobros excesivos sin posibilidad de defenderse.
En Estados Unidos, la transparencia médica es una política de Estado. En México, las autoridades financieras y de salud permanecen como espectadores de un sistema que protege más a las corporaciones que a las personas.
Miren cómo este gob corrupto quiere acabar con la clase media.
— Bere Aguilar (@bereaguilarv) October 28, 2025
En 2026 pagaremos más caro el seguro médico, el del coche, etc., porque las aseguradoras tendrán que pagar IVA por cada siniestro que cubran.
¿Y quién creen que lo pagará? ¡Nosotros! pic.twitter.com/oeLIIERvp0
Se Necesitan Reformas Urgentes Para Las Aseguradoras En México
El panorama del sector asegurador revela un modelo desbalanceado. Las aseguradoras en México mantienen altos márgenes de ganancia mientras reducen beneficios a los clientes y comisiones a los agentes. La falta de control, sumada a la ausencia de un sistema judicial ágil y de instituciones con verdadero poder regulador, ha permitido que los abusos se repitan sin consecuencias.
Los especialistas consultados coinciden en que se necesitan reformas urgentes que garanticen condiciones justas para todos los actores del sistema. Entre las propuestas destacan fortalecer la autoridad de la Condusef, crear un registro nacional de agentes con protección laboral y establecer mecanismos legales que sancionen a las aseguradoras por incumplimientos o prácticas abusivas.
De no hacerlo, advierten, el mercado de seguros en México seguirá operando bajo una lógica desigual, donde el asegurado paga más por recibir menos y los agentes son castigados por cumplir con su deber.
La experiencia internacional demuestra que es posible construir un sistema justo y transparente. Pero para alcanzarlo, es necesario que el país asuma el compromiso de regular con firmeza a las aseguradoras, protegiendo a quienes verdaderamente sostienen el sistema: los usuarios y los intermediarios que los representan.
			








